Somos unos asesinos natos, compitiendo por ser el más prestigioso, acabando con nuestros objetivos y rivales, antes de que ellos acaben con nosotros, o nos pille la policía. Colocados los personajes sobre las losetas, en nuestro turno podremos mover donde queramos a un personaje o a un policía, investigar con un policía, o asesinar con nuestro personaje.
Somos tribus beduinas en el desierto cuyas caravanas de camellos se enfrentarán por el dominio de las abrasadoras arenas, los escasos oasis y los deseados pozos de agua. Después de colocar por turnos a los líderes sobre el tablero, cada jugador puede poner, cuando le toque, dos camellos de los colores que elija, para ampliar sus caravanas de camellos.
Como agricultores cultivaremos judías compitiendo entre nosotros y contra la Mafia de las judías por obtener el mayor beneficio vendiéndolas. Los jugadores, por turnos, podrán plantar judías en sus campos. Cuanto mayor sea el conjunto de judías de un tipo plantadas, más monedas obtendrán al venderlas.
Somos tribus de piojos hawaianos, que compiten por apoderarse de los pelos de Paulani, nuestra "casera". Los jugadores se irán turnando para colocar cartas de piojo (en secreto, descartando cartas de la mano, o boca arriba, sin descartar) con un valor determinado junto a uno de los pelos, que representan la fuerza con la que tiran del pelo.
Cada jugador, en su turno, debe colocar una pieza (cada uno tiene las mismas en un color diferente) en contacto con una o más piezas de su color únicamente por la esquina. El que tenga piezas de menor valor por colocar al final de la partida, gana. Versión de viaje sólo para dos jugadores (a partir de cinco años) del "Blokus".
Una cadena de hamburguesas compite contra otra de pizzas por ser la más exitosa en el mundo de la comida rápida. No importa el idioma ya que no tiene más texto que las reglas. Mecánica sencilla, con ejemplos, y partidas de una media hora. Para dos jugadores, a partir de diez años.
Según la edición estaremos escalando o circulando por una carretera..., pero lo cierto es que se trata de saber cuándo parar de tirar dados y avanzar lo máximo posible en diferentes columnas. En su turno, cada jugador debe tirar cuatro dados y hacer dos parejas con ellos, sumando sus resultados. Éstos determinarán en qué columnas subir (del dos al doce).
En torno a la ciudad amurallada de esta ciudad francesa, los jugadores deben colocar a sus seguidores (caballeros, monjes, ladrones o granjeros) sobre el terreno de la forma más conveniente posible para ganar la partida. Cada jugador coge y coloca, por turnos, una loseta de terreno para formar ciudades, claustros, caminos o granjas.
Seremos dos nobles a los que el rey ha encargado supervisar la construcción de un castillo. El que consiga construir los mejores patios, será nombrado gobernador del castillo. En nuestro turno debemos jugar al menos una carta, que nos permite construir ciertas piezas y robar otra (o más si la carta que jugamos lo permite).
En la adulterada corte de una ciudad-estado italiana, representamos el papel de una influyente familia que tendrá que emplear sus peores artes (desde el engaño al asesinato) para eliminar al resto de familias y mantener nuestra influencia. Cada jugador recibe dos cartas de personaje (de los cinco posibles) que le permiten, cuando le toque, realizar sus acciones o bloqueos correspondientes.
Somos los monos más habilidosos, elegidos por el antiguo rey de la Montaña de los Monos, jugando al juego de los monos, de encestar cocos, para decidir quién gobernará el lugar. En cada turno un jugador tira un coco: si encesta en un vaso amarillo, se lo lleva y lo coloca en su tablero; si lo hace en uno rojo igual, pero puede volver a tirar.
Somos dos arqueólogos en la selva de Centroamérica, ante las ruinas de las pirámides del Jaguar, enfrentados por la forma de reconstruirlas. Competiremos por hacerlo antes que nuestro rival, siguiendo el método de construcción más fiel al original. A excepción de las reglas, no hay ningún texto dentro del juego.
Un dragón ha caído en la trampa que colocaron tres enanos que le aguardan armados para derrotarlo. El dragón tendrá que escapar o acabar con los enanos antes de que éstos acaben con él. En su turno, los jugadores podrán robar y/o jugar cartas de su mazo para mover a su personaje por el tablero o atacar.
Somos aprendices de mago, buscando objetos mágicos perdidos en un laberinto de paredes invisibles, antes de que nuestro Maestro se entere de que los hemos perdido. En cada turno un jugador tira un dado y mueve a su mago por el laberinto (tantas casillas como aparezcan en el dado) hacia un objeto mágico que se ha sacado al azar de una bolsa y está sobre el laberinto.
Somos nobles egipcios compitiendo por conseguir los mejores artículos para nuestra futura tumba en el valle real. Partiendo de un mazo de cartas básico, durante la partida, podremos usar las cartas de nuestra mano para comprar cartas de la base de una pirámide cambiante o colocarlas en nuestra tumba para puntuarlas, individualmente o por sets.
Somos agricultores en Mallorca, compitiendo por cosechar y repartir la mayor cantidad posible de nuestros frutos (limones, naranjas, higos,...) a las haciendas de los pueblos de la isla. Reglas sencillas y muy bien explicadas, con ejemplos. Se aprende y se juega fácilmente con cualquiera y en dos partidas se controla el abastecimiento del molino y cómo mejorar la puntuación.
Florencia, siglos XII - XIV: las familias más poderosas pretenden destacar sobre las demás construyendo las torres más altas posibles. Nosotros seremos constructores que compiten por realizar más y mejores encargos para estas familias, a fin de lograr el mayor prestigio. Reglamento corto y sencillo, muy bien explicado con ejemplos.
No hay tema, simplemente las cartas representan cosas como chocolate y leche y puede haber una meta que sea leche con chocolate. El juego se define a sí mismo como "El juego de reglas cambiantes" y eso es lo que ofrece: un juego de cartas en el que todo puede cambiar con sólo una carta.
Somos gubs compitiendo contra nuestros adversarios y los avatares del destino por formar la colonia más poderosa. Cada jugador, en su turno, puede robar una carta y jugar cuantas cartas tenga en su mano en su área personal o contra otros jugadores, según el tipo de carta. Existen varios tipos: gubs, escudos, trampas, amenazas, interrupciones y eventos.
Aunque el título y el diseño se inspiran en el antiguo Egipto, el tema brilla por su ausencia... Cada jugador recibe, ocultas, losetas con números positivos y negativos, y unos contadores de su color. En su turno, cada jugador colocará uno de los dos (las losetas con ocultas, después de revelar su número) sobre la cuadrícula del tablero hasta que esté completo.
Representamos a un par de mercaderes que compiten vendiendo productos por ser el Mercader personal del Maharajá. Los jugadores tendrán que conseguir e intercambiar productos en el mercado (las cinco cartas en el centro de la mesa), para luego venderlos a cambio de rupias (fichas circulares con valores numéricos) y bonificaciones según la cantidad del mismo producto vendida.
Somos expertos montañistas compitiendo por llegar a lo más alto (y sobrevivir) del K2, el segundo pico más alto del mundo (tras el Everest) con ocho mil seiscientos once metros de altura, superando la falta de oxígeno y las condiciones climáticas adversas. En cada ronda los jugadores seleccionarán las cartas que jugarán y que permitirán a sus dos montañistas ascender, descender, colocar una tienda de campaña o ganar oxígeno para aclimatarse.
Somos monstruos compitiendo por destrozar la ciudad de Tokio más que nadie. Cada jugador es un monstruo y, en su turno, tirará los dados hasta tres veces y podrá utilizarlos para ganar puntos de victoria, recuperar puntos de vida, ganar energía o dañar a otros monstruos (rivales: al que está en Tokio o a los que están fuera). El primer monstruo que llegue a veinte puntos de victoria o sobreviva, gana la partida.
Los demonios que habitan el Horamundo (una zona ajena al tiempo y al espacio), buscando entretenerse, atraparon e hicieron luchar a los krosmaster, los mejores guerreros del Krosmoz (universo alternativo). Nosotros representaremos a los krosmaster en la arena de combate, donde debemos derrotar a nuestro rival.