Somos los que vamos a ser quemados, atados, golpeados y pasados por la espada. Éste es el juramento del gladiador. Esto es lo que somos. Los hijos de Némesis, aquellos a los que la justicia de los hombres ha condenado a luchar hasta la muerte en el foso, y en coliseo. Cuando morimos, cumplimos nuestra pena. Cuando matamos, somos el brazo de la ciega justicia.
Es muy curioso, y digno de mención, que es uno de los pocos casos que conocemos en los que la editorial se ha lanzado a hacer las ediciones en muchos idiomas del mismo juego. Hay casos en los que se hace una única edición que incluye las relgas y componentes en varios idiomas, y en algún caso una compañía lanza la edición de un eurogame o similar en varios idiomas distintos.
En un circo lo importante es el dinero, especialmente el sagrado dinero que se usa para pagar a los magos. O bueno, aparte de magos, también hay otros artistas: los malabaristas, los acróbatas, los domadores y los forzudos. En total, cinco categorías, pero bueno, casi podíamos decir magos y no magos. ¡A ver si un malabarista hace aparecer una paloma de la nada!
Targi es un juego pequeño que ya ha tenido ediciones en varios idiomas. El juego tiene una fuerte dependencia con el idioma, y a no ser que se quiera estar todo el rato mirando alguna chuleta o tradumaquetar las cartas, recomendamos hacerse con la edición en castellano si se está interesado en el juego.
De los estrenos más sonados de Feld parece que, al menos desde el punto de vista de componentes, es uno de sus proyectos más ambiciosos: caja enorme, mucho troquel, diseño bonito y a falta de dados... ¡una cube-tower! Y es esto último lo que marcará la principal mecánica del juego, ya que cada turno, se irán echando de modo sucesivo los cubitos de un color a la torre.
Los componentes son buenos, el cartón se destroquela normal (con cuidado y buena letra), y la caja se adapta perfectamente a ellos; compacta y sin aire en exceso, no se le puede pedir mucho más. Destacan los planetas, de troquel grueso, aunque también hay cartas y algunos cubitos, y por supuesto, el contador de dinero (puntos de victoria).
Se trata de un euro en el que aunque no se colocan trabajadores, es importante gestionar y optimizar nuestros recursos. No es nada innovador en sí mismo, aunque tiene algunos mecanismos que van bastante bien. Destaca la elección del orden del juego, que se elige al principio de cada turno, y que con los multiplicadores que hay hace que sea muy caro mantenerte arriba durante muchos turnos.
El tema del juego (que está pegado) es el mercadeo de piedras preciosas. Nos convertimos en mercaderes del Renacimiento que utilizan su riqueza para adquirir minas, métodos de transporte y artesanos que permitirán transformar bastas piedras en magníficas piezas de joyería. El principal componente del juego son las cartas.
La temática del juego ya se intuye por el título. Se trata de un encierro, dividido en cuatro carreras o tramos del recorrido, en el que tendremos que controlar tanto a nuestro corredor, como a un toro y novillo de nuestra ganadería. Gana el juego quien más puntos haya conseguido al final de las cuatro carreras. En cada una, lo primero será colocar los novillos, los toros y los corredores.
Amigos, crear un negocio no es fácil... Son muchos los tropezones y los dolores de cabeza hasta que ya por fin parece que está en marcha. Nosotros admiramos a la gente valiente que empieza de cero, que apuesta, arriesga, que se ilusiona, a aquellas personas que plantan cara a la vida y persiguen sus sueños.