El gremio "Strategists Guild" se combina a la perfección con una estrategia militar, cuya puntuación final oscila entre seis y doce puntos. El gremio "Philosophers Guild" también beneficia la estrategia militar, porque tus vecinos al dar la batalla por perdida procuran potenciar otras estructuras, entre ellas las científicas (cartas verdes).
El clásico no es un juego que me apasione, ni tampoco lo considero un juegazo para todos los premios/galardones que tiene; pero sí reconozco que se deja jugar bastante bien. Características como su corta duración, número de jugadores o su sencilla mecánica hacen que vea bastante mesa, sabiendo esto... prefiero que el juego venga acompañado de todas las expansiones posibles para sacarle todo el jugo en cada partida.
Aún recuerdo esa sensación que experimenté la primera vez que jugué a este juego, esa tensión creciente a lo largo de cada ronda, esa granja que daba pena verla, el querer tener de todo y para colmo tener que alimentar a tu familia para no ganar esa maldita mendicidad. Esta explosión de sensaciones se repetía una y otra vez en mi cabeza, al acabar la partida.
Os mostraré tanto los componentes como el diseño, muy bonito aunque no os lo creáis. Luego haré una reseña fotográfica para que tengáis una visión del juego lo más completa posible pero sin entrar en los detalles y terminaré esta primera parte con una pequeña conclusión. El juego comprende seis rondas, cada una de ellas consiste en tres fases: A, B y C.
Volvemos a la carga de nuevo para seguir explicando qué esconde este juego que tanto furor esta causando en la red lúdica. A mí me tiene atrapado ya que ha visto bastante mesa en las últimas semanas. Al comienzo de la ronda, cada jugador tira sus tres dados y por orden de turno colocará uno de ellos en cualquiera de las acciones disponibles teniendo en cuenta que siempre debes colocar un valor inferior al valor más bajo que ya se encuentre en esa loseta.
Se trata de un juego de acción simultánea, donde se combina la agudeza visual y mental. Últimamente estoy reforzando mi ludoteca con estos juegos. De momento llevo un par de partidas a seis jugadores y son de los juegos que con sólo leer las reglas o explicarlos ya sabes que van a triunfar. Un juego de los que hay que tener para calentar la mesa o en sesiones con no-jugones.
Esta nueva expansión me llama bastante la atención porque han añadido dos nuevas modalidades de juego y amplía el numero de jugadores de seis a doce (se agradece bastante), sin embargo, no voy a hablar de ella sino que me centraré en las tablillas de voto. Mi primera partida fue un comienzo a lo grande porque éramos doce personas.
Sólo con ver las miniaturas sobre el tablero ya tenía unas ganas enormes de catarlo; el sistema de juego me llamó mucho la atención. Otro aspecto a destacar es el número de jugadores al que está destinado, tengo muy pocos juegos que estén totalmente pensados para dos, el resto están parcheados o adaptados.
Cada vez que lo saco me gusta jugar una partida con cada bando y ésta es la dosis suficiente para no saturarme. Jugar siempre con la misma persona puede ser algo cansino porque los movimiento pueden llegar a ser predecibles e incluso mecánico, como si te pones el piloto automático. Se agradece cambiar de oponentes y que haya una nueva mente pensante sobre el tablero.
Qué gran alegría me dio ver de nuevo a estos diablillos involucrados en ese fantástico mundo que ha creado Vlaada Chvátil. Son de los juegos que me entra por los ojos y ganan puntos de "compra compulsiva". A pesar de ello, la primera vez que lo vi pensaba que era una expansión del "Dungeon Lord" o que directamente sería muy parecido.
Me centraré en un análisis más profundo en el que contaré mi primera experiencia, la progresión, rejugabilidad, algunos consejos para mejorar nuestro juego y por último una recopilación de opiniones de distintos jugadores. Ver todo el juego desplegado asusta, para que nos vamos a engañar. Recomiendo llevar un orden en la mesa y verás que al final no es para tanto.
Un juego totalmente independiente que se puede jugar sin el original. La mecánica del juego es exactamente la misma pero con dos nuevas variantes para los jugadores más exigentes. Aquí pretendo presentar los componentes de ésta nueva versión, centrarme en las nuevas variantes y mostraros el plato fuerte de esta edición que es cuando combinas ambas versiones.
Este juego sale muy poquito a mesa porque siempre lo jugamos a partir de seis jugadores y el espacio que ocupa transportarlo equivale a cinco o seis fillers. Por estos motivos jugamos a la versión principiantes. A pesar de ello, todo el que lo prueba le gusta y siempre se quedan con ganas de más. Antes de empezar repasamos las tres o cuatros reglas básicas que no se pueden olvidar.
Después de enseñar filler, party-games y algún que otro juego sencillo, es la hora de aumentar un gradito más de dificultad y que den el siguiente paso ya que el más importante está dado. Para esta ocasión tengo reservado este juego en su versión básica y así familiarizarlo con la planificación y la gestión de recursos. Además tiene una buena escalabilidad.
En la mayoría de los juegos de mesa los efectos de tus decisiones y acciones repercuten en el resto de los jugadores. Simplificando esto, voy a describir dos formas de jugar: los que van a su rollo y juegan sin pensar en las consecuencias de sus acciones; y por otro lado, los que son empáticos con todos los jugadores de la mesa y maquinan cómo sus decisiones afectan a los demás.
Cambiamos el método básico (carta de acción al azar a cada jugador) para decidir el jugador inicial por el experimentado. Este consiste en que cada uno recibe cinco cartas de acción (más el senador). Cada jugador escoge una de ellas y la coloca en el centro de la mesa boca abajo. Luego se muestran todas y la carta cuyo nombre vaya antes alfabéticamente será el jugador inicial.
Aunque parezca mentira, éste es el primer cooperativo que ha entrado en mi ludoteca. Este nuevo concepto en los juegos me picaba la curiosidad, tenemos que dejar a un lado nuestro lado más competitivo e individualista y mostrar otras habilidades más sociales orientadas al grupo en la que se persigue un objetivo común.
¿Un juego de piedras? Pues sí, esa es la magia que tienen los juegos abstractos en el que apenas existe temática o carece de ambientación. Sus componentes (fichas, dados, tablero,...) no representan el comportamiento y característica de seres u objetos reales ni imaginarios. Además uno de sus puntos fuerte para mi gusto es que dependen menos del azar.
Sabía de antemano que sería un juego con el que disfrutarían más mis amigos o familiares que yo; pero he aprendido a pasármelo bien. Con el tiempo comprendí que su verdadero potencial es la ambientación en la que transcurre, su puesta en escena atrae muchísimo. He llegado a ver a niños exaltados e incluso mayores nerviosos por las tortas que iban a recibir.
Para muchos, éste puede llegar a ser un gran juego con el que se le pasarán las horas y las horas; para otros será un buen candidato para desconectar tras una dura partida de varias horas y sacar todo el estrés acumulado; en cambio otros ni siquiera se ven jugando ya que no le atrae nada de nada. Todas estas reacciones son muy respetables, pero a la gran mayoría le ha gustado.
Un juego familiar con mucha interacción, tortas, diversión y buenas dosis de azar. Esto último se debe a que dependemos del resultado de los dados para actuar y muchos arriesgarán mientras otros se conformarán con los resultados; esto es un arma de doble filo porque o lo pierdes todo o te sale una buena jugada.
Esta expansión esta dividida en cinco pequeños módulos que pueden ser añadidos al juego base de manera independiente o combinanda, a gusto del consumidor. Esto hace que el juego sea escalable y rejugable con el fin de mejorar la experiencia de juego. Este formato de expansión me recuerda al "Fresco" donde puedes ir añadiendo módulos para aumentar la profundidad del juego.
Llevaba mucho tiempo deseando probar la mecánica del rondel (selección de acciones) pero no tenía ningún juego que la incorporase, por lo que empecé a preguntar, leer reseñas, pedir consejos,...y la mayoría apuntó al éste como el juego que estaba buscando. Quiero mencionar la gran calidad del tablero y de sus componentes.
El diluvio ha comenzado y es el momento de embarcar a los animales a bordo de los transbordadores que se dirigen al Gran Arca de Noé. La tarea no va a ser fácil: cada barco admite un peso máximo y a la hora de embarcar hay que tener en cuenta la especie y el género de los animales. Se trata de un juego con una mecánica facil.