En este juego los jugadores asumen el rol de los personajes de un pequeño pueblo que tratan de desvelar qué monstruos de los sueños acechan a la figura del durmiente. El primer personaje que revele la localización y la identidad del resto de los asesinos ganará la partida, con un sistema de juego de combate por cartas.
El supuesto tema se desarrolla a base de la colocación de nuestros barquitos en el curso del Nilo, siempre bajando corriente, lo que nos permite conseguir una serie de cartas que cambian en cada turno, nos permite posicionarnos para las construcciones y nos permite aumentar nuestra población de currantes.
En este juego encarnaréis el papel de goblins que están en un submarino que se cae a cachos, vuestro objetivo salir vivos de él llegando a puerto. Para ello debéis evitar que el submarino estalle por la presión o que mueran ahogados o carbonizados por el fuego. Un juego en parte cooperativo donde os reiréis de lo lindo.
Es un juego muy rápido de explicar. Dependiendo del rol que te toque desempeñar tu objetivo puede variar entre matar al Sheriff, defender al sheriff o tan "sencillo" como sobrevivir. De esta manera, cada jugador tendrá una identidad oculta. Consta de un total de dieciséis personajes diferentes cada uno con una habilidad especifica.
Cada jugador en su turno cojera una loseta y la intentara colocar de la mejor manera posible para así empezar a crear los castillos donde podremos colocar a los caballeros, caminos para colocar ladrones, monasterios donde poder poner a los monjes o finalmente engrandar los prados para intentar abastecer el mayor número de castillos posibles con nuestros granjeros.
El juego cuenta con unas ilustraciones espectaculares y con una mecánica bastante interesante que cautivarán tanto a los amantes de la saga como de los juegos en equipo, dado que de las diferentes campañas que el juego trae en la caja básica, menos una de ellas la dificultad es realmente grande y costará sudores conseguir superar la aventura.
Pues la idea del juego es muy sencilla. Cada uno de los jugadores representa a una civilización, exploradores, aventureros o colonizadores, como más os guste llamarlos que llegan a la isla. Estos colonizadores, tienen que expandirse, para ello, la isla cuenta con los materiales necesarios para la construcción de carreteras, poblados y ciudades.
En el juego representamos a jefes Incas que debemos expandir el imperio a lo largo de cuatro reinados distintos. Para ello disponemos de trabajadores que debemos dedicar a la conquista de nuevas regiones, a la construcción de templos y fortalezas, y sobre todo y principal, construir caminos incas, porque en este juego se llevan puntos todos los que tengan carreteras conectadas con cada edificio.
Se supone que somos colonizadores del nuevo oeste en la labor de expandir la pequeña población de Carson. Así que a lo largo de cuatro turnos deberemos tomar el papel de uno de los personajes disponibles, con sus habilidades especiales, y colocar nuestros meeples en las distintas opciones del tablero: compra de parcelas, obtención de puntos, obtención de pasta o conseguir carreteras y pistolas.
La mecánica es la elección de roles. El juego sólo tiene dos tipos de carta: mundos que debemos colonizar/conquistar, y desarrollos que debemos construir para aprovecharnos de sus habilidades. Las cartas sirven, además, como moneda de pago para los planetas y desarrollos, y son a la vez los recursos que se producen en los planetas.
Aún recuerdo esa sensación que experimenté la primera vez que jugué a este juego, esa tensión creciente a lo largo de cada ronda, esa granja que daba pena verla, el querer tener de todo y para colmo tener que alimentar a tu familia para no ganar esa maldita mendicidad. Esta explosión de sensaciones se repetía una y otra vez en mi cabeza, al acabar la partida.
Grandes reyes de Egipto luchan por hacerse con el control de las tierras bañadas por el Nilo... Claro que en aquella época yo no sabía que el 99% de los juegos abstractos tenían la temática pegada. Tampoco es que ésto me importara mucho, la verdad, los que ya me conocen saben que si el juego funciona bien, la temática no me importa demasiado.
Pues se trata de un juego de combos, de optimizar tus escasas acciones. En cada turno lanzamos dos dados, y cada dado te permite una acción en función del resultado, bien sea comprar losetas, colocar esas losetas, o vender mercancías. Para estas tres acciones el número del dado es importante porque debe coincidir con el sitio de compra, el sitio de construcción o el bien a vender.
En cada turno lanzas los dados, y con un máximo de tres repeticiones, y sin poder repetir los dados calavera, debes hacer crecer tu población, conseguir recursos, alimentar tus ciudades y construir maravillas, amén de descubrir tecnologías, que es donde está la chicha. Y todo esto con una tablilla, unas clavijas, una hoja, unos dados y un boli. Riete tú de los babilonios.
Se supone que somos elfos que como ceremonia iniciática deben recorrer todas las ciudades de Elfenland, atravesando diversos tipos de terrenos para los que hacen falta diversos tipos de medios de transporte, y en el que podemos aprovecharnos de los medios ajenos para poder recorrer más rápido el país, ganando el que antes consiga pasar por todas las ciudades.
En él se supone que controlamos a familias aristócratas en pugna por tener una mayor influencia en la Europa medieval-moderna. Lo de siempre, uso intensivo de pegamento para el tema. Al abrir la caja nos encontramos con una de las grandes obviedades del juego, y es que es muy bonito. Un bellezón en cuanto a componentes. De hecho supongo que a los que lo hemos seguío desde su lanzamiento lo que nos engatusó fue su estética.
En este juego los jugadores asumen el rol del Afrika Korps dentro de la campaña militar de África del Norte que enfrentó a las fuerzas aliadas (británicas, australianas, indias, sudafricanas) con las fuerzas del Eje (italianas y alemanas) lideradas por el mariscal de campo Rommel, el 'Zorro del Desierto' (Wüstenfuchs). Constituye una expansión auto-jugable para "Barbarossa".
En este juego los jugadores asumen el rol de las fuerzas del Tercer Reich dentro de la "Operación Barbarroja" (Unternehmen Barbarossa). Este juego, presenta al ejército alemán bajo el diseño gráfico de un colorido mundo anime de nínfulas nazis. Con la "Operación Barbarroja" Hitler planeó la invasión de la Unión Soviética.
Los componentes son una auténtica pasada, en especial las miniaturas de los monstruos, que están realmente geniales y que me están dando ganas de sacar mis pinceles y pintarlas acorde el juego para ambientar más aún las partidas. Si os gusta Cthulhu, éste es vuestro juego, una auténtica gozada, no os defraudará seguro.
Si te gustan los juegos donde tener que deducir y comerte el coco intentando seguir los pasos a un asesino en serie, éste es tu juego; donde un equipo tomará los roles de los diferentes policias que llevaron la investigación de los crímenes de Jack el destripador, y en el otro bando, uno del grupo será el propio Jack.
El diseño de los componentes resulta espectacular. El detalle de las miniaturas, el diseño de las cartas, el reglamento, el tapete de juego,... Todo a nivel de diseño resulta inmejorable. Sin embargo, en cuanto a la calidad de los componentes quizá podría haberse mejorado el grosor de las cartas y del tapete de juego.
Si hace unos días os traíamos una entrevista con el autor de este gran juego de mesa, hoy os traemos algo que no podía faltar... nuestro unboxing del mismo donde podréis descubrir exactamente qué es lo que viene dentro de esta gran caja que podemos hacer gracias a la cortesía de Devir.
La cosecha de almendras, naranjas, limones e higos está a punto de empezar. Los campos de olivos de huesudas ramas y los viñedos al sol forman un paisaje casi mágico. Y en él destaca una casa de agricultor con varios siglos a su espalda, construida en resistente piedra y equipada con un gran molino de viento: tu finca.
Hace tiempo que tenemos este unboxing realizado, pero por diferentes motivos no lo habíamos colgado. Un juego donde viajaremos en el tiempo muchos años atrás, a la época del Coliseo romano y gladiadores; y en dicha era, deberemos montar espectáculos que atraigan al público para conseguir ser el mayor promotor de eventos de la época.