Un juego distinto al que me esperaba. Una versión que cambia de forma tan radical el juego, que hace que incluso la duración deje de ser infinita para poder terminarla en unas dos horitas. Aquí es cuando se os deberían poner los ojos como platos y desencajar la mandíbula hasta rozar el suelo porque... ¿Qué carajos han hecho para lograr ese cambio tan radical en un juego como este?
Además de cambios bastante importantes en el reglamento, han incorporado un cambio de estética alucinante. Si antes teníamos un gran espacio "perdido" en el centro del tablero, ahora lo que tenemos es una gran ciudad... bueno... más bien eso dependerá de vosotros los jugadores... ¿Vamos a ello?
Esta edición de lujo nos llega dentro de una lata en la que, si bien el arte es muy llamativo, aún lo es más su curiosa forma. Dentro trae un inserto que a la hora de jugar nos facilitará enormemente la preparación de las partidas, pero que (todo hay que decirlo), para guardar las cosillas da un poco de pereza.
Recorre el tablero comprando distritos y construyendo una metrópolis. Cada distrito de la parte central del tablero se corresponde con un grupo de casillas. Si caes en un distrito sin propietario... ¡Cómpralo o subástalo! Después de desplegar el tablero y asignar una ficha a cada jugador, se le da el dinero inicial, se colocan las cartas de distrito en el inserto y las de suerte en el tablero listas para ser cogidas.
Encendemos la unidad de comercio y... ¡a comenzar! El objetivo, al igual que en otros juegos del estilo, es dejar en bancarrota al resto de jugadores. Para ello lanzas los dados para desplazarte por el tablero y hacer distintas cosas según la casilla en la que hayas caído. Desde pagar impuestos o darle dinero a otro jugador, hasta comprar un distrito vacío en el que hayas caído.
Las diferencias con el juego clásico empiezan siendo visuales: las construcciones ya no van al borde, sino que están en el centro para conformar la ciudad. Aparte ahora para construir, no es necesario que tengas todos los terrenos de un mismo color. Salvo para los rascacielos ya que con ellos duplicas el cobro de dicho color.
Hay edificios de protección y edificios para fastidiar. Si tienes la suerte de poder coger uno de estos, siempre te darán a elegir entre fastidiar o proteger. En el caso de que quieras fastidiar, coges una miniatura de las negras y la pones en un terreno a sabiendas de que todas las casas que haya en dicho terreno serán obviadas cuando un jugador tenga que pagar.
¿Habéis probado alguna vez a jugar a oscuras? ¡Que pregunta más extraña para un sitio en el que se comentan juegos de mesa! ¿Verdad? Pues ese es el reto al que os vais a enfrentar con este juego. Me consta que no es un juego habitual y que, por el aspecto, muchos vais a pensar que es una tontería... Yo lo pensaba con temor hasta que lo jugué.
Bueno... pues después abrir la caja, leer todas las instrucciones y aprender a cómo jugar... no hay nada como echar este juego al suelo y empezar a pisar su tablero. ¿Estamos listos? Hoy vamos directamente con el vídeo, que una imagen vale más que cuatro palabrejas.
Una cajita "pequeña", para un juego que una vez desplegado ocupa lo suyo. ¡El último jugador que quede en pie es el ganador! Gira la ruleta y mueve tu mano o pie al color que salga. Retuércete, dóblate, enrédate,... pero hagas lo que hagas... ¡No te caigas! Si apoyas la rodilla o el codo en el suelo, o si te caes completamente... ¡Estás eliminado!
Como veis, soy una persona bastante versátil en cuanto a gustos jueguiles. Cierto es que este pobre no es que vea mucho... suelo (obviamente jugar a esto en la mesa sería la peor idea que se os podía ocurrir), pero vamos, que cuando se saca lo que no faltan son las risas y el buen royo. Aunque claro muchos adultos ya se sienten tan de palo que...
Hoy estamos aquí para hablar sobre un juego bastante curioso. Es uno de esos juegos de hoy día que por el look que tienen se hace quizás un poco difícil saber a quién va dirigido ¿Es para críos? ¿Para adultos con alma de niño? ¿Para todos? Yo nunca me he fiado, fío o fiaré de las edades que ponen en los juegos de mesa. De ahí mi duda.
Te adentras en el campo de batalla con un implacable ejército formado por infantería, caballeros y arqueros. Planea cómo colocar a tus tropas y descubre cuál es la mejor estrategia... Estamos ante un juego en el que al igual que en la vida real, el azar tiene cabida... pero lo puedes minimizar aportando estrategia. Después de todo... siempre hay unidades que son más efectivas contra otras.
Si os gusta el ajedrez o los wargames, yo creo que este juego os debería de gustar. Cada unidad tiene sus habilidades específicas y su sistema de ataque particular. Básicamente el objetivo es derrotar al rey enemigo. Si cae... has ganado. Pero para ello tendrás que plantearte bien las cosas porque en este juego la estrategia es fundamental.
Hoy estamos con un juego que lleva mucho tiempo en mi mano y la caja lo muestra ¿Qué le voy a hacer si hasta hace poco no me ha dado por empezar a guardar los juegos en vertical? Es que no me gusta ponerlos así porque en la mayoría se caen las cosas y soy de los que odian el caos en la caja de un juego de mesa. ¿Eso significa que estoy más cerca del lado oscuro?
Volvemos con uno de esos juegos que necesitan una mesa inmensa para jugarlos, o bien como bien dice este juego: ¡al suelo! Y es que estamos ante un juego de críos en el que vamos a estar lanzando cosas. Eso sí, al ser lanzamientos a ras de suelo, se usan fichas como proyectiles en lugar de bolas... Es una locura en la que... ¡tonto el último!
Abrir la caja, montar, flipar,... está muy bien, pero... ¿Dónde córcholis vas a meter la señora caja que trae? Si bien el arte, aunque de la época, me gusta, no puedo decir lo mismo de la calidad del cartón, que al ser tan enorme raro es si tienes alguna parte plana. Hay vistazos al pasado que dejan mejor sabor de boca y vistazos que no dicen nada.
Estamos ante un juego interesante (los hay mejores obviamente), que también está bastante cuidado en el apartado visual. Porque no nos llevemos a engaño con la idea de que porque el look sea infantil tenga que estar descuidado: tan solo hay que mirar las miniaturas para darse cuenta de ello. ¿Una productora industrial de juegos creando juegos con minis pre-pintadas?
Como sabéis soy un amante de este juego y como tal me gusta ir viendo variantes del mismo. No es algo en lo que ponga mucho ímpetu ya que por distintos que sean... son el mismo juego. Pero bueno, debo admitir que me encanta. Dicho eso, esta es una de esas versiones que no me terminaba de convencer. Un juego que depende de un DVD, VHS,...
Llevo mucho tiempo detrás del "Battlelore". Lo que no tenía claro es cuál de todas las ediciones pillarme porque dado el precio que tienen... no podía arriesgarme a comprarlas todas. Había que elegir y ésta terminó poniéndoseme a tiro en el mercado de segunda mano y sinceramente me alegra no haberlo comprado a precio de tienda porque después de tenerlo en mano sigo pensando que no vale lo que dicen.
¿Quién no ha soñado de pequeño poder estar a los mandos de un coche y sentir la sensación del cambio de marchas en sus manos? Desde el punto de vista jugón... ya depende. Si sois anti dados este no es vuestro juego. Personalmente me ha encantado porque eres tú y no los dados quien se labra su destino. Si arriesgas y eres un manta probablemente acabes en la cuneta.
Lleva al motor hasta sus límites, negocia las chicanes, pégate a la rueda de tus rivales y aprovecha su rebufo para ponerte en cabeza... Tendrás que asumir riesgos por anticiparte si quieres estar entre los mejores pilotos y subir al podium. De nuevo estamos ante un juego que no requiere demasiada preparación. ¿Estamos listos?
Una vez empieza todo, es importante saber que sólo podrás subir/bajar una marcha por turno (Lls marchas te permitirán tirar un dado que haga que avances más o menos) y que en caso de necesitar más... será a costa del cambio de marchas. Si te cargas el coche ya sea por él, por el motor, las ruedas,... ¡Estás fuera!
Estamos ante un juego de gestión de tiradas, de ser previsores y en el que las curvas son tremendamente importantes. Tanto es así que cada curva requiere de un número mínimo de paradas (cuenta como parada el momento en el que terminas tu movimiento a final de turno) y si no lo haces... vas mal... muy mal. Al principio cuesta pillarle un poco el tranquillo, pero tranquilos que eso no dura mucho.